Todos sabemos la importancia que tiene mantener nuestra boca sana y en el caso de nuestros peludos – gatos y perros – ocurre exactamente igual. Una boca en mal estado repercute negativamente en todo el organismo.
Muchas veces en consulta, lo que más nos comentáis que os molesta es la halitosis o mal aliento: “le huele horrible la boca” … “no hay quien se acerque”…
Pero realmente éste es el menor de los problemas, y aunque puede afectar al día a día en la convivencia, el problema va mucho más allá: esa boca que huele mal significa dolor, salivación excesiva, dificultad para masticar y deglutir adecuadamente.
Nuestros peludos no dicen nada, sabemos que su umbral del dolor es elevado, pero te podemos asegurar que hay dolor y a veces mucho… Lo más importante y peligroso es que una boca enferma corre el riesgo de sufrir enfermedad periodontal y favorecer infecciones graves que afecten a órganos importantes como el hígado, corazón y riñón.
Si no hay una higiene bucal adecuada cualquier perro a partir de los 2-3 años puede tener enfermedad periodontal. Las razas pequeñas son más propensas porque tienen los dientes muy pequeñitos y juntos y es más fácil que se acumule la comida en ellos, además de un pH que favorece la formación de placa. También los perros braquicefálicos son propensos a la enfermedad periodontal por sus dientes “apiñados”, especialmente en los más abueletes.
Una alimentación casera o blanda o un mal pienso también favorecen que el alimento quede pegado al diente y que se vaya formando la placa.
Cómo prevenir la formación de placa bacteriana
Lo ideal y más efectivo es acostumbrar a tu peludo a cepillarle los dientes desde pequeño. Es importante utilizar una pasta específica para perros y gatos, que sea enzimática, porque estas enzimas son las que hacen que no se forme el sarro.
En ningún caso debes utilizar dentífricos humanos, porque se los tragan y resultan tóxicos para ellos!!
Si “se dejan“ limpiar los dientes a diario , mejor que mejor pero si no, con 2-3 veces a la semana será suficiente para prevenir la formación de sarro.
Aparte del cepillado que es lo ideal, existen también otros productos que dificultan la presencia de bacterias que se pegan al diente y producen la placa:
- Premios mordedores que actúan como limpiadores; en este caso han de ser acordes a su tamaño y deben masticarlos, pues si no, no hacen su función. Además existe el riesgo de que se los traguen en trozos grandes pudiendo atragantarse o tener una obstrucción.
- Sprays dentales.
- Colutorios sin sabor para diluir en el agua.
- Polvos para poner en la comida.
- Snacks naturales duros (tipo huesos y nervios)
Y por supuesto un buen pienso!!
Si tienes dificultades para limpiarle los dientes a tu peludo, o dudas sobre qué productos o pienso son los más adecuados, consúltanos. En nuestra clínica veterinaria te aconsejaremos lo mejor para tu pequeñín.