WeCan_blog_veterinario_49

Qué es el síndrome de disfunción cognitiva en perros y gatos

¿Qué es y cómo afecta el síndrome de disfunción cognitiva (SDC) a nuestros peludos?

Se trata de una patología degenerativa que afecta al sistema nervioso central de nuestros abuelitos. 

Se caracteriza por un deterioro gradual de sus capacidades cognitivas: para que lo entendamos bien, nuestro perro o gato va a sufrir una serie de alteraciones en su comportamiento diario como consecuencia del paso de los años para su cerebro, produciéndose una serie de cambios metabólicos, estructurales y funcionales que lo van a ir deteriorando.

Esto no quiere decir que todos los abuelillos vayan a sufrir este problema: hay varios estudios que sugieren que hay peludos que envejecen de forma normal o “exitosa”, otros tienen una disfunción leve y otros desarrollan demencia o una disfunción más  grave.

¿Qué es lo que vas a observar? ¿Cómo sospechar que tu perro o gato abuelete, tiene disfunción cognitiva?

Básicamente, por alteraciones en su comportamiento:

– Se despitan en lugares conocidos, tanto en casa como en la calle; sobre todo en casa, se quedan parados delante de una pared, son incapaces de salir de detrás de una silla o un mueble o no encuentran el lugar de salida por una puerta, entre otros.

– Alteración en el ciclo vigilia-sueño: no duermen por la noche, deambulando sin más, o lloran, ladran y reclaman atención durante la noche, durmiendo más por el día.

– Pérdida de hábitos aprendidos: orinan o defecan en sitios inadecuados, se les olvida cómo responder a órdenes que tienen aprendidas o son incapaces de aprender cosas nuevas.

– Aumenta su nivel de ansiedad, se ponen más nerviosos  y asustadizos ante ruidos, se agobian mucho cuando se quedan solos en casa.

– Alteración en sus relaciones sociales, tanto con la familia como en la calle: están más irritables, nerviosos e incluso agresivos con personas y  otros animales, o bien pierden interés por el contacto con nosotros, se aíslan o por el contrario, hay una demanda exagerada de atención.

– Disminución de la conducta de acicalamiento en los gatos y alteraciones en el apetito, tanto por disminución como por aumento del mismo.

– Los felinos además pueden tener conductas de tipo compulsivo, como girar en círculos o autolesionarse.

Todos estos son los síntomas más comunes, pero no son específicos de esta patología, por lo que nunca está de más hacer un chequeo a nuestro abuelete, para llegar a un diagnóstico lo más certero posible y valorar objetivamente si se trata del síndrome de disfunción cognitiva.

¿Cómo puedes ayudar a tu peludo si presenta este problema?

Aunque no existe un tratamiento curativo para el síndrome de disfunción cognitiva (SDC),  si puedes establecer unas pautas que mejorarán la calidad de vida de tu abuelete, sobre todo para disminuir su estado de ansiedad y estrés, ralentizando la evolución de la enfermedad.

Es muy importante eliminar la riña o el castigo porque con ello sólo conseguirás aumentar su ansiedad. 

Es bueno establecer un horario de rutinas que puedas cumplir diariamente tanto en los paseos, como en su alimentación y juegos para que tu peludo pueda saber lo que va a ocurrir en cada momento y se sienta más seguro. Se trata en la medida de lo posible, de tenerle ocupado buena parte del día, o al menos el tiempo que puedas dedicarle, según tus circunstancias.

● En el caso de los perros que tengan problemas de movilidad, es bueno aumentar el número de paseos, más cortos, eso sí, pero siempre a las mismas horas. También entrenamientos de órdenes sencillas con refuerzos positivos: chuches , comida, caricias… Juegos de esconder o encontrar premios, alfombras olfativas, juguetes dispensadores de comida…

● Para aquellos peludos que hayan perdido vista y/o audición, se pueden añadir en el entorno olores o elementos táctiles que les ayuden a saber en qué habitación se encuentran.

● La bandeja de tu gatete debe estar en un lugar accesible y fácil de localizar: es conveniente que no sea muy alta y que sea grande, preferiblemente con arena aglomerante no perfumada.

● Darles masajes relajantes en su cama antes de dormir les ayuda a conciliar el sueño y descansar más tranquilos.

En cuanto al tratamiento, no existe uno como tal. Actualmente optamos por una terapia combinada con las pautas de  comportamiento y enriquecimiento del entorno que hemos comentado anteriormente, además de fármacos, nutracéuticos (suplementos nutricionales ) y una dieta especial.

Ante cualquier duda sobre el comportamiento de tu abuelete, siempre te recomendaremos pedir cita para poder explorarle y valorar su estado, probablemente con un chequeo completo, que nos permita descartar o confirmar otras patologías y plantear la mejor manera de ayudarle.

Comparte

Contacto

DATOS DE CONTACTO

C/ Dragonera 5
28290. Las Rozas. Madrid

Tef.  91 631 84  95

HORARIO

Lunes – Viernes:
11:00 – 14:00  |  17:00 – 20:00

Sábados:
11:00 – 14:00

URGENCIAS

En caso de urgencia fuera del horario, te atenderán en el Hospital de Urgencias Veterinarias Hurvet  (Avda. de Isabel de Farnesio 2 – Boardilla del Monte – 91 417 39 77 )